Bueno chicos, otro Domingo de ruta. Este fin de semana hemos tenido muchas bajas, entre comuniones, celebraciones, el dia de la Mare de Deu,…. El grupo ha mermado considerablemente, pero bueno nos lo hemos pasado bien.
Hoy hemos hecho la PR- CV 235 en la localidad de BICORP se llama la de los cuatro ríos y todos estábamos expectantes con la ruta. Salimos de Aldaia a las 10:30 e íbamos 9 senderistas: Lucía, Eider, Laura, Artur, Hugo, Paqui, David, Miguel y la nueva integrante de hoy que es Maria Ángeles.
Empezamos desde Bicorp, villa con gran cantidad de olivos, almendras, algarrobos, y que ronda los 570 habitantes, dejamos los coches a las 12:00 de la mañana y empezamos la primera cuesta que nos llevaba a la calle calvario que es donde estaba el poste del principio de la ruta. Seguimos subiendo por una pista asfaltada hasta llegar a la cruz del calvario, seguidamente abandonamos la pista asfaltado y a unos 200 metros, paramos a almorzar. David traía consigo un pallet, como asiento, que nos sirvió para tener un almuerzo confortable.
Ya empezaban los primeros calores, pero una vez terminamos de almorzar continuamos la ruta. Cruzamos la carretera y empezamos a subir una cuesta que nos llevó por un camino forestal hacia la montaña. Vimos madrigueras y nos adentramos por las arboledas de la montaña, hasta llegar a una choza que parecía un puesto de melones donde nos hicimos unas gracias, como si estuviéramos en un mercado vendiendo melones.
Seguimos la subida hasta llegar a la cima, de la montaña donde se veía una paisaje espectacular, pero todavía no habíamos visto nada de agua, e imaginaros los críos como iban. Nos cantaban canciones todas relacionadas con “ agua, agua y agua “. Laura sacó hielo que llevaba en la mochila y todos querían echarse un poco para refrescarse. Paqui sacó chucherías y por lo menos entre unas cosas y otras los críos encantados, pero “ sin agua “. Empezamos a bajar y Hugo iba refunfuñando todo el rato, menos mal que empezó a cantar canciones de Alaska y se vino arriba enseguida. La verdad es que somos un grupo un poco cantarín. Buenos pues seguimos por la ruta, había piedras curiosas, con cristales, y con mucha formas, muy curiosas. Nosotros seguimos bajando en busca del agua. A Laura le empezó a salir sangre por la nariz, pero rápidamente se sobrepuso y nada a terminar de bajar.
Bueno al final llegando a la falda de la montaña, descubrimos el río, seco pero lo vimos, nos llevamos un fiasco al verlo, pero seguimos la marcha, hasta que……….. oímos un ruido y allí estaba el río. Que contentos estábamos todos, el agua estaba fresquita y nuestro pies nos lo agradecía, pasamos el río, una, dos, tres y hasta cuatro veces, que bien estaba todo.
Seguimos y ahora nos tocaba empezar a subir, el río se quedaba abajo, Hugo se llevó un recuerdo de unos rosales que le hicieron una mala pasada. Subiendo, subiendo llegamos a casa de Maria Ángeles, la verdad que lo tiene muy bien acondicionado, corre mucho el aire, tiene cultivado David unos olivos y unas hiervas, que dice que es para los champus pero yo creo que serán para beber. La mala suerte es que se les olvidaron las llaves y no pudimos entrar y nos tuvimos que quedar en el porche. Allí comimos muy bien, David nos dijo que había dejado unas cervezas en la nevera, pero no pudimos entrar. Cuando terminamos de comer seguimos nuestra subida, hasta llegar a un cruce de una carretera, que había unos árboles y allí corría un montón de viento, se estaba muy, pero que muy bien. Cuando se nos fue el calor, bajamos por la pista forestal al pueblo y por el camino que habíamos empezado.
A las 16:00 horas dimos por terminada la ruta en el bar del pueblo, allí un lugareño de allí no hacía nada más que hacer bromas a los chavales, luego les regaló unos caramelos. A la vuelta pasamos por la presa de Tous y terminamos en Antella, donde nos volvimos a mojar los pies por el canal, un sitio precioso que volveremos. Y nada yo nada más que metiendo prisa a los chavales y los chavales
BUENO CHICOS ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO LA HAZAÑA. CREO QUE EL CALOR YA APRIETA Y LAS RUTAS HAY QUE CAMBIARLAS POR EL MAR
