martes, 1 de julio de 2014




VAYA MANERA DE PADECER EN FIN DE SEMANA

Pues si, nueva salida a padecer, y el es que la excursión prometía, salida el Viernes a las 16:15 desde La Ecijana, con las bicis en casa de Jose para que Dino se las llevara. Llegaron los niños muy impacientes pero con un sueño de la siesta, que no veas. Pero ¡ a la ! dirección de casa de Jose, allí nos hicimos las primeras fotos.

Allí estábamos la primera expedición: Jose, Rosa, Artur, Santi, Lucía, Iker y Eider. Y allí empezó nuestra aventura, salimos a las 17:00 horas de Aldaia, camino de Acossebre, el viaje muy tranquilo, los niños muy expectantes, y en un abrir y cerrar los ojos allí nos plantamos, en el Camping Tropicana, serían sobre las 18:15 cuando llegamos, nos recibió un loro que no hacía nada más que hablar  " holaaa, holaaa ", recogimos las llaves de los apartamentos y nada con los bártulos para arriba.

El primero era normalito, con una terraza que ya nos estábamos imaginando los gin tonic de por la noche




APARTAMENTO DE LAS COMIDAS
 ENTRADA TRIUNFAL AL CAMPING






El segundo es el que se metieron los adolescentes, que estuvieron todo el fin de semana que no había quien los sacara de allí, tenía un zulo ( así lo llamábamos ) que era una habitación que daba a la terraza del apartamento, muy coquetona, pero que no sé como aguantaron, entre el flight para los mosquitos, y el olor a humanidad. Pero se lo pasaron en grande, que es lo que cuenta.

La cocina y el resto de la casa del apartamento 2 estaba muy bien y muy fresquita













Una vez que nos acomodamos, llamamos a la segunda avanzadilla, que estaba cargando bicicletas en el furgón de Dino. En esta avanzadilla venían Dino y Santi mayor,




Miguel también ayudó en la carga de bicicletas, pero ya le estaba dando envidia la marcha que llevábamos en Acossebre. 













Nosotros mientras tantos, los niños con sus mochilas para las habitaciones, nos pusimos el bañador y ¡ a la ! a la piscina, que con lo acalorados que estábamos nos hizo un bien que no veáis. Y a los niños pequeños en el tobogan ni os cuento.









Y cuando cerraron la piscina, pues a la playa, un no parar




 Mientras la segunda expedición no venía los llamábamos y o no tenían cobertura o se quedaban sin batería, pero nosotros a por unas cervecitas fresquitas del Charter, que por estar estaba debajo de donde estábamos , no nos faltaba de na. Lo que os digo, hemos padecido muchiiiismo, como dicen en mi pueblo.
Lo que no teníamos era pan, y cuando vinieron Dino y Santi, antes de bajarse, fuimos al pueblo a comprar , pero pese a las horas que eran, que eran las 21:45, conseguimos pan y bien bueno, que tuvimos para el almuerzo.
Hicimos unas patatas a lo pobre y unas salchichas para ellos y unos chorizos para nosotros que vamos nos supo a gloria, unos preparaban la cena, otos fregaban, otros ponían la mesa, vamos un equipo. Pueden estar tranquilas las mamás que no han pasado penurias. Y nada después de la cena un rato de conversación, nos echaron el chito a las 12:00 una mujer, y nada a las 2:00 nos acostábamos entre unas cosas y otras.
Al día siguiente costó levantarse, las bicicletas llamando y nosotros sin hacer caso,





Cuando se levantaron los niños a desayunar pan tostado con tomate y aceite, jamón y fuerzas para toda la mañana, Vamos que seguíamos padeciendo








Cuando terminamos, nos fuimos a la playa a jugar al voley, y cuando salíamos, vino la tercera expedición, con Miguel, Alba y Laura. Vamos la habitaciones completas y en el " Zulo " no cabía ni un niño más. Buenos pues jugamos y nos bañamos y luego a la piscina. Cervecita fresquita del apartamento y a padecer con los chavales.
Y nada nos volvimos a dividir para organizar la comida y menudos macarrones salieron, con queso como le gustan a Miguel. Yo no he visto comer a nadie queso con tanta avaricia, ni que se lo fueran a quitar. Después de comer siestecita para relajarnos, los niños piscinas que ya se conocían todos los corricuetos del camping y a las 18:00 horas vueltecita por el camping






Luego Jose y yo fuimos a por pan con la bici al pueblo y allí nos dimos una vuelta por el paseo con las bicis, que estaba a reventar.




 Y vuelta para el camping, que ya estaban haciendo la cena para los niños. Hamburguesas, lomo y patatas fritas, con pan y tomate. 
Nosotros que tampoco comimos mal, a base de gambas, habas y jamón. Que manera de padecer con las gambas y el jamón. Y cuando menos te lso esperabas, buscabas a Miguel y siempre tenía una cerveza con unos taquitos de queso en la mano.

Luego los peques como recorrían todo el camping, trajeron un erizo, que nos hizo la velada más amena.
Y como abajo no teníamos ya a nadie que nos molestara pues se habían ido de viaje, en la terraza estuvimos todo el rato. " Padeciendo "





Y nada el día siguiente, lo mismo, almuerzo a las 10:00, Luego hubo un grupo que se fué al pueblo con las bicis.


Como veis teníamos todo tipo de fauna en el camping: gatos, loros, papagayos, erizos,..., estábamos entretenidos


Al final la cuarta expedición llegó a la hora de la comida, nos comimos una clotxinas que flipas y el arroz tampoco estaba muy mal y nada a las 17:30 finalizó la acampada. Dino decía que dijéramos que lo habian metido en el calabozo y que no lo soltaban hasta después de una semana.




 La vuelta fue dura, muy dura, sólo había que ver las caras de todos. Hemos padecido mucho, pero que mucho

BUENO HASTA LA PRÓXIMA